Primer día libre de Adelaide en una larga semana.
Bien…Hagamos un recuento de lo ultimo:
Día uno: Charla con el jefe. Afuera llovía. Día aburrido.
Día dos: Café en lo de Lily, mas charla con el jefe. No llovía tanto. Día no tan aburrido.
Día tres: Visitar a Tamssel. Matar mafiosos. Ni idea como estuvo el clima. Día estupendo.
Día cuatro: Reunión con los jefes de los clanes, algún tipo raro quema la torre de Thomas Clark y por algún motivo el jefe anda aun más extraño que de costumbre. Clima normal. Día…ehm… ¿Interesante?
Y ahora llegamos al fantástico día de ayer, osea el día cinco: El jefe pesca algún resfriado-loco-kavian y se le ocurre convertirme en líder de todos los Gangreles de la ciudad, mato a uno de los míos y el público me vitorea. Día… Día de mierda.
Si, de mierda, lo sé, lo repito mil veces. ¡Yo nunca le pedí que hiciera nada por mí! Soy la líder de un Clan de nómadas animalistas y que de alguna manera encuentran que nuestra ciudad es un buen patio de recreo.
Pero bueno, a lo hecho pecho ¿O no era así el dicho? Veamos, veamos, primer acto oficial: Reunirme con los pequeños Nosferatu de Devon. ¡Bleh! Aburrido.
Llego a uno de los barrios bajos donde los chiquillos de Devon me hablan con tartamudeos cobardes. Dicen que su maestro declara completa lealtad a Saint John y que esperan mantener los lazos que lo unen con el Clan Gangrel.
Compromiso numero dos como líder de los Gangreles: Reunirme con la chiquillada, unos cuantos novatos recién lanzados a la vida pasan a saludar y a verme de verdad, seguro nunca han visto a una mujer que los puede matar en el desayuno. Uno de ellos me cuenta sobre un incidente en el Parque Robinson con los Devonbardes ¡Je! Devon-Bardes. Bueh, eso explica por qué el tipo me declaro su lealtad. Chico listo seguro sabe que no es nada contra mí. Dejo a los pequeñuelos y corro, corro por los tejados libremente para sentirme por una vez más viva.
Compromiso numero tres: Tomar un café con Lily ¡Hey! Las mujeres también podemos pasar tiempo de chicas, no porque sea una vampira con ciento cinco años significa que no pueda divertirme. Lily sigue tan feliz como siempre, a veces deseo que Saint me dejara abrazarla para poder tener una compañera, seguro seriamos imparables.
Compromiso número cuatro y final: Vuelta a la Torre Saint y una charla ilustrativa sobre lo que el jefe aprende en el En Sueño, al parecer la misión de Clark se está complicando y el chiquillo-diablere ¿Cómo se llamaba? Esto… ¡Samiel! Quiere hacer que el Sabbat ataque la ciudad. Je, seguro ni sabe lo que le espera.
Mi nombre es Adelaide, soy la líder del Clan Gangrel. Y definitivamente este trabajo me gusta cada vez más.
Bien…Hagamos un recuento de lo ultimo:
Día uno: Charla con el jefe. Afuera llovía. Día aburrido.
Día dos: Café en lo de Lily, mas charla con el jefe. No llovía tanto. Día no tan aburrido.
Día tres: Visitar a Tamssel. Matar mafiosos. Ni idea como estuvo el clima. Día estupendo.
Día cuatro: Reunión con los jefes de los clanes, algún tipo raro quema la torre de Thomas Clark y por algún motivo el jefe anda aun más extraño que de costumbre. Clima normal. Día…ehm… ¿Interesante?
Y ahora llegamos al fantástico día de ayer, osea el día cinco: El jefe pesca algún resfriado-loco-kavian y se le ocurre convertirme en líder de todos los Gangreles de la ciudad, mato a uno de los míos y el público me vitorea. Día… Día de mierda.
Si, de mierda, lo sé, lo repito mil veces. ¡Yo nunca le pedí que hiciera nada por mí! Soy la líder de un Clan de nómadas animalistas y que de alguna manera encuentran que nuestra ciudad es un buen patio de recreo.
Pero bueno, a lo hecho pecho ¿O no era así el dicho? Veamos, veamos, primer acto oficial: Reunirme con los pequeños Nosferatu de Devon. ¡Bleh! Aburrido.
Llego a uno de los barrios bajos donde los chiquillos de Devon me hablan con tartamudeos cobardes. Dicen que su maestro declara completa lealtad a Saint John y que esperan mantener los lazos que lo unen con el Clan Gangrel.
Compromiso numero dos como líder de los Gangreles: Reunirme con la chiquillada, unos cuantos novatos recién lanzados a la vida pasan a saludar y a verme de verdad, seguro nunca han visto a una mujer que los puede matar en el desayuno. Uno de ellos me cuenta sobre un incidente en el Parque Robinson con los Devonbardes ¡Je! Devon-Bardes. Bueh, eso explica por qué el tipo me declaro su lealtad. Chico listo seguro sabe que no es nada contra mí. Dejo a los pequeñuelos y corro, corro por los tejados libremente para sentirme por una vez más viva.
Compromiso numero tres: Tomar un café con Lily ¡Hey! Las mujeres también podemos pasar tiempo de chicas, no porque sea una vampira con ciento cinco años significa que no pueda divertirme. Lily sigue tan feliz como siempre, a veces deseo que Saint me dejara abrazarla para poder tener una compañera, seguro seriamos imparables.
Compromiso número cuatro y final: Vuelta a la Torre Saint y una charla ilustrativa sobre lo que el jefe aprende en el En Sueño, al parecer la misión de Clark se está complicando y el chiquillo-diablere ¿Cómo se llamaba? Esto… ¡Samiel! Quiere hacer que el Sabbat ataque la ciudad. Je, seguro ni sabe lo que le espera.
Mi nombre es Adelaide, soy la líder del Clan Gangrel. Y definitivamente este trabajo me gusta cada vez más.
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